Italia traspone las Directivas Europeas 2012/27/UE y 2018/2002/UE sobre eficiencia energética.
El pasado 14 de Julio, el Consejo de Ministros italiano, a propuesta del Ministro de Asuntos Europeos, Vincenzo Amendola, y el Ministro de Desarrollo Económico, Stefano Patuanelli, aprobó un decreto legislativo que implementa la directiva (UE) 2018/2002 que modifica la directiva 2012 / 27 / UE sobre eficiencia energética. Italia da así un paso más en el cumplimiento de las normativas europeas de eficiencia energética, y como ha hecho ya la gran mayoría de los países europeos, regula la medición de calefacciones centrales, su comunicación y su facturación.
Desgraciadamente, España sigue a la cola de Europa en este tema, teniendo aún pendientes de transposición los artículos relativos a la contabilización individual de calefacción tras 8 años de lentos avances que todavía no han culminado en ningún texto firme. Despues de varios avisos por parte de la Unión Europea, contando incluso con la amenaza de levantar un expediente sancionador, en nuestro país se elaboró hace meses un borrador del Real Decreto para la regulación de los consumos individuales en instalaciones de calefacción y agua caliente centralizados. En dicho borrador se fijaban ya los plazos límites para que los titulares cumplan con la obligación de individualizar los consumos en sus calefacciones centrales, ya sea mediante la instalación de contadores de energía como de repartidores de costes.
La medición individual de los consumos y el posterior reparto de los costes en base a los consumos reales es posiblemente la iniciativa de eficiencia energética más rentable y de más fácil aplicación de cuantas existen. Se estima un ahorro cercano a los 1.100 millones de euros, una reducción de las emisiones de CO2 de 1,05 millones de toneladas de CO2 anuales y la creación de 2.000 puestos de trabajo directos. Sin embargo, requiere de una legislación clara y exigente para garantizar el cumplimiento de unos objetivos mínimos y que además protejan al cliente.
